Porque el té no “se hace en frío”, se hace “en caliente”… y se deja enfriar! *
Nuestra recomendación es hacerlo con la mitad del agua necesaria - por ejemplo, si quieres hacer un litro: prepáralo con solo medio litro de agua y la dosis de té adecuada para un litro (en general, 4 cucharadas de postre), y una vez transcurrido el tiempo de infusión (de 2 a 5 minutos en función del tipo de té), añádele la justa cantidad de cubitos de hielo (equivalente a la cantidad de agua con la que has preparado el té), y además déjalo 20/30 minutos en el congelador… Tendrás un refresco delicioso, sano y natural!
Nuestra preferencia va hacia los tés con frutas, como por ejemplo el té verde con jengibre y limón – súper refrescante! El clásico té verde con menta, el de piña colada que aportará un toque dulce, la exótica combinación de mango y fresas…
Si además quieres un refresco sin teína, apto para toda la familia: el roibos sorbete piña/limón, o el de granada y uva... Las infusiones de frutas del bosque, o la muy caribeña mezcla de plátano y coco… Para grandes y pequeños, de día y de noche, sabrosas preparaciones con muchos beneficios!
Recomendamos consumir el preparado en el mismo día de su elaboración. Como todo tipo de alimento preparado, cuanto más tiempo lo mantenemos en nevera, mas propiedades va perdiendo.
* Se puede hacer también el té “en frío”, dejándolo macerar entre 6 y 8 horas… por nuestra parte es un método que no recomendamos… es más difícil controlar el tiempo correcto de infusión, no podemos disponer de él en un tiempo corto, y alarga mucho el tiempo de permanencia en remojo. Sencillamente, no nos gusta el método…
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